Desapego
Ustedes bien saben que si algo me caracteriza es mi predisposición a desafiar los límites. Llamenlo problemas de autoridad, rebeldía, ignorancia, audacia, desapego.
Mientras escribia esto, me puse a razonar sobre el origen de ésta palabra en particular, y el relato cambió drásticamente en torno a ella.
Según la Real Academia Española (versión online)
desapego:
Falta de afición o interés, alejamiento, desvío.
Falta de afición o interés, alejamiento, desvío.
Sin embargo, poco tiene de explicación.
Desapego: como bien sabemos el prefijo des se utiliza para referirnos a la ausencia de algo, y ego viene del Latín yo. Haciendo una rápida busqueda puede comprobar que este término lo utilizaron por primera vez los budistas para referirse a la desunión del yo. Desprenderse del afecto a uno mismo y poder observarse desde un punto de vista exterior. Y todos sabemos que cuando no pertenecemos, no estamos involucrados a algo podemos ser imparciales, críticos, cosa que rara vez sucede mientras estamos en una posición egocéntrista, que es lo mismo que considerarse el ombligo del universo.
Para poder crecer, para poder aprender de los errores, uno siempre debe ser capaz de hacer autocrítica.
Pero puede ser algo complementamente más trascendente cuando uno puede sentir ese cambio de una forma física.
Sucede que por primera vez en mi vida, tomé una sesión de Shiatsu.
Se trata de una técnica japonesa, fruto del estudio del o-sensei Tokujiro Namikoshi, durante el siglo XX. Basado en las milenarias enseñanzas de la Médicina China Tradicional, consiste en aplicar presión en ciertos puntos designados. Concretamente, Shiatsu significa Presión con el Dedo (shi, dedo; atsu, presión).
Algo que no puedo obviar mencionar para que tengan una ligera comprensión de lo que sucedio, y de como esta escuela de pensamiento dista tanto de lo que estamos acostumbrados, y es que, en la Medicina Tradicional China, los médicos cobraban por mantener a una persona saludable. Tan pronto como el "paciente", comenzara a sentirse enfermo, el tratamiento pasa a ser gratuito. Tiene sentido, no? Según sus principios, la energía vital o Ki, fluye abundamentemente cuando una persona esta feliz y se siente en armonia. Tan pronto como el Ki comienze a menguar, el cuerpo se enfermará. Dado que estos tratamientos datan de más de cinco milenios, es comprensible entender que es preferible mantener sana a la persona, que esperar a que enferme para intenar curarla, donde habia poca probabilidad de su recuperación.
Con una suave música oriental con instrumentos de percusión de madera muy ligeros y espaciados, sonido del correr del agua, y cantos de pájaros (son sagrados para la cultura china), la concentración era máxima.
Tal vez sea esa misma voluntad que arde dentro mio la que "despertó" con el Shiatsu. Lo cierto es que, al cabo de una hora de aspiración y presión, mi cuerpo se convirtió en una usina nuclear. Podia sentir cada simple pelo de mi cuerpo erecto y en estado de agitación, apenas tenia fuerza para moverme porque todos mis músculos estaban cargados de electricidad (y esto los vuelve rígidos), a punto tal que apenas podia hablar porque sentia los labios y especialmente la zona del bigote (aunque estaba afeitado), tiesa, electrificada. Los escasos minutos luego de que me dejaran reposar, fueron, lejos de duda, los más extasiantes que haya vivido. Una sensación de completo bienestar, que partia de mi mente, y se distribuía por el cuerpo con natural cauce.
Y en ese momento pude notar un cambio majestuoso. Ya no era una mera sensación de placer, era como modelar agua, como abrazar energia (no luz, más bien la sensación que uno podria percibir cuando entra en una cámara frigorífica y nota ese aire frío que nos recubre, y nos reduce gradual pero implacablemente nuestra temperatura hasta equeilibrar la del ambiente, como explican las Leyes de Termodinámica).
Siempre me sentí atraido por el Budismo, la sabiduría y filosofia oriental, especialmente la japonesa. Ahora mismo siento una necesidad de comprender lo máximo posible de ellos. Ahora se que no son meras enseñanzas y preceptos para alcanzar una paz interior. Sé que hay una frontera sobre lo que nos permiten apreciar los sentidos y la realidad, y debo atravezarla.
Acercarme al Zen.

0 Commentarios:
Publicar un comentario
<< Hogar dulce hogar